1. Transformación personal
Soy vegetariana-vegana y mi estilo de vida nació en Portugal, tras muchos meses cocinando e investigando platos e ingredientes 100% de origen vegetal. Como filosofía de vida (ya lo decía Sir Paul Mc Cartney -miembro de una de las familias vegetarianas pioneras del Reino Unido), “si los mataderos tuvieran ventanas todo el mundo sería vegetariano”. Y es que no se trata sólo de evitar la crueldad sino que, además hay que estar sano. Es necesario conocer como es una dieta vegetariana completa.
Así nació mi marca Jam-me con la que comencé elaborando recetas no excesivamente complejas y coloridas siempre. Apetecibles o Jam-me (juego de palabras entre el vocablo inglés ‘yummie’ (delicioso) y jam (mermelada)-me (a mi) , pues comenzamos haciendo y distribuyendo mermelada 100% saludable, sin azucares y a menudo ecológicas.
Desde los comienzos de Jam-me participó y ha organizado eventos y festivales en Viseu (Portugal), dando a conocer sus productos y recetas, en su página Facebook. Considero que para promover la dieta vegetariana, ha de hacerse de manera correcta y completa.
2. Qué es ser vegetariano y vegano
¿Qué significa ser vegetariano o vegano? Nada hoy en día es 100% así, pero se trata de una filosofía vital que promueve reducir al máximo el consumo de productos de origen animal, tanto en la alimentación como en todos los aspectos cotidianos (vestimenta, calzado, espectáculos que exploten animales…) Significa ser sensible al mundo que nos rodea, en el que no somos la figura clave pero si una de las más destructivas.
El vegetariano elimina de su dieta el pescado y la carne, mientras que el vegano también los lácteos y huevos en definitiva todo lo que su origen sea animal. La dieta vegetariana por tanto está basada en las verduras.
3. Conciencia y filosofía
Todos cohabitamos un planeta que debería respetar todas las formas de vida, humanas o no. Si amamos (y no nos comemos) a nuestros animales de compañía…por qué deberíamos comer a un conejo, un cerdo o un cordero? Ellos también sienten amor y hay personas que los tienen de mascota.
Cierto es que los animales necesitan espacio (y aire libre, como los humanos) pero el sufrimiento sin fin al que las granjas de producción masiva los confinan nos debería llevar a replantearnos algo insostenible (por no decir inhumano).
4. Qué debe incluir la dieta vegetal
¿En qué consiste una dieta vegetal? Casi todo lo que necesitamos esta ahí, en la tierra: plantas y hierbas aromáticas, semillas y cereales, verduras y hortalizas.
Y si no lo encuentro en la tierra, en el océano: las algas son un gran complemento a una dieta vegetal de alimentos de la tierra. No deben faltar en nuestra despensa -y ayudan a los que echan de menos el sabor a mar.

Junto con las semillas de chía o linaza molidas (para su mejor absorción). También unas buenas gachas, granolas de avena u otro cereal saciante con topping de frutas. Con una buena mantequilla de cacahuete sin conservantes endulzará, o también con sirope de arce.
5. Las proteínas
Incluyamos siempre una buena proteína (legumbres, guisantes, setas, tempeh, tofu). Si no

se es alérgico al gluten el seitán queda delicioso en múltiples recetas y es fácil de preparar en casa.
Recordad que las grasas saludables como las del aguacate y el licopeno del tomate maduro que podemos asar, freír nos ayudaran.
6. Frutas y verduras
Incluid también algunas crucíferas en sopa, o al vapor…como el brécol, la coliflor o cualquiera de las coles.

Aprovechad siempre las frutas y verduras locales, por ejemplo ahora en invierno la calabaza, la batata, el caqui. En cualquier caso disfrutad de las que estén en su temporada: unas buenas alcachofas a la plancha, o un romanescu en los meses más fríos.
Variemos nuestros humus añadiéndoles remolacha, calabaza, zanahoria (otro básico en nuestra dieta, siempre peladas antes por los aditivos y conservantes) o preparamos un delicioso pate de berenjena asada.
7. Hidratos y aceites
El desayuno puede también incluir pan en vez de muesli, con harinas nutricionalmente más ricas, como la de espelta o la de castaña. Lo importante es no dejarse nada.
Cocinemos platos de pasta todo en uno o deliciosos platos al horno cubriéndolos de anacardos rallados o avellanas molidas.
Compremos siempre aceite de oliva virgen extra (preferiblemente de primera presión en frio) y no abusemos de los fritos (el aceite de oliva se vuelve toxico a partir de una cierta temperatura) y otros como el de sésamo para aderezar nuestros platos. Por cierto, usad sal marina sin refinar y ya lo tenemos todo para que la dieta vegetariana sea bien saludable.
8. Colores
La dieta vegetariana incluye mucha variedad de productos. Prioricemos el color rojo (granada, frutos del bosque, pimiento rojo…) rico en antioxidantes y licopeno, y el verde intenso (espinacas, kale…) por su clorofila y ácido

fólico. Tomemos brevemente el sol por la vitamina D y suplementemos de vitaminas del grupo B.
El potasio y el ácido fólico (plátanos, manzanas…) también importan mucho.
Comamos con razón y corazón. Por un mundo mejor y más solidario.
Laura Ayar
STYLE4LIFE
Me gusta cómo lo describe. ¡Perfecto!